Empezare
citando al maestro Reynoso para quien la fórmula del escritor es leer, leer,
leer y vivir, vivir, vivir, sin querer desde que nací me sentí llamado por la
literatura, solo que yo mismo no lo sabía, hasta que un día en Sao Paulo en el
año 2005 me di cuenta de que quería ser escritor, aquí los diez libros de mi
vida.
1.-
La romana: En un tiempo
lejano que ya casi no recuerdo en medio del encierro en el que
transcurrió mi primera infancia me di cuenta que leer me abstraía de la
realidad, así en un día de castigo encerrado en una biblioteca de casona
colonial me topé con un libro que no era para niños, La romana de Moravia la
leí cuando tenía ocho años, no la comprendí en sus detalles pero la historia
fue suficientemente poderosa para hacer que los castigos pasaran con rapidez.
2.-
El vientre de Paris: Las ideas de fuga, evasión y clandestinidad siempre
estuvieron presentes en aquellos días de mi niñez, cuando la imaginación es más
desbordante y las aventuras de este ex convicto por las calles de Paris parecen
tan reales, imaginaba escapando del internado y perdiéndome en las calles de
una Lima que aun no conocía a similitud de Florant por los recovecos de
Paris del 1800.
3.-Un
mundo para Julius: Cuando leí este libro aun no era libre, pero
comprendía perfectamente el mundo que retrataba y lo detestaba. Un niño
tratando de que el mundo se ajuste a la medida de su imaginación en una vista
Lima desde los rincones de una mansión, los ideales de un Perú que ya se
va lentamente y que felizmente no volverá.
4.-El
amor en los tiempos del cólera: Decía Cortázar que solo hay tres temas de los cuales
escribir: el amor la vida y la muerte. El amor en los tiempos del cólera es
para mí el ejemplo del amor sincero y leal que prevalece a pesar del tiempo y
las arrugas de personajes que se conocen adolecentes y terminan reuniendo sus
almas como un rio bifurcado que se vuelve uno solo hasta llega al mar.
5.-La
tía julia y el escribidor: El humor en esta extraordinaria novela de Mario me
hizo echar del aula una vez que mi profesor de matemáticas me descubrió leyendo
este libro en plena clase de ecuaciones, me reí tan fuerte por el caso de
Sarita Huanca de 40 años creyendo que todos la querían violar y los papas
flanqueando una virginidad que para nada ya servía, valió la pena terminar este
libro en medio de los corredores de mi escuela secundaria.
6.-
La palabra del mudo: Ya adolescente fui muy asiduo a fiestas de mis
compañeros a las cuales casi siempre me invitaban, esta vez descubro este libro
que me llamaba desde el mueble de la biblioteca en medio de un salón de baile,
se me ocurrió leerlo sentado en un sofá en plena fiesta adolescente y mientas
todos se reían de los chistes y ocurrencias de mis compañeros yo me retorcía
de risa con la historia de la vieja quinta y don Manuel con la vieja
mulata de al lado, y el loro y el gato, y la guerra de las plantas, que me mis
amigos miraban extraños esa relación mía con los libros.
7.-Rayuela: En un lugar perdido en medio del pantanal llamado
Dourados me encontré con una amiga argentina que me regalo este libro, un
experimento que no hilaba como una novela convencional, pero que me remitió a
profundos vaivenes de penas y alegrías, como era mi viaje, sentí honda
pena por bebe Rocamadour y me reí a carcajadas con la historia del gato
calculista, con Rayuela comienzan a aparecer mis primeros trazos de
escritor, escribiendo sentidos e mails, que como cartas, paliaban la pena de mi
ausencia de siete años fuera de mi país, lejos de mi madre.
8.-
Memorias de Adriano: Ya de vuelta de mi autoexilio un día en Lima gris
compre este libro en la feria del palacio de gobierno, siete soles era lo único
que disponía mi economía de rebelde escritor novel y me pareció una buena
inversión, me ayudo a construir los personajes en primera persona al leer
a esta mujer francesa encarnar al gran emperador y como transmitía los
sentimientos de una ausencia marcada por su amante muerto.
9.-
Los ríos profundos: No pude contener una lagrima cortando mi ya no dulce
rostro a mis mas de treinta años al cerrar este libro en un bus de regreso de
Huanchaco, los internados son cosa del pasado, pero no podía dejar de sentir
esa honda huella que dejan en los espíritus libres, como yo Ernesto
también maduro de pronto, ya no fui niño nunca mas después de la muerte de mi
padre a los 5 años de edad, cuando yo marche por primera vez al encierro.
10.-
En octubre no hay milagros: Lima siempre fue para mi un referente, viniendo de
provincia la primera impresión de la gran ciudad no es menos impactante que
para un inmigrante de la sierra, de la mano de mi tío paterno conocí la Lima de
los grandes salones, el club de la unión y el bar del hotel Mauri donde se
reunían los antiguos señores de Lima, en mi adolescencia conocí el centro
prohibido en los años 90. Me regocijaba perdido entre las tiendecitas endebles
detrás del palacio de gobierno, jugando taco en lince o cruzando por el jirón
Trujillo, a mis dieciséis con otro espíritu hermoso y maldito, Lima es idéntica
en la novela del gran maestro peruano OR.
Mauricio
Málaga ha publicado dos libros: la novela "El malabarista" y el libro
de cuentos "Carrusel".
4 comentarios:
Uno mas de los grandes.... bien mi mau
Buena elección Mauricio, te falto el Malabarista, una gran obra tuya que me gusto mucho! un fuerte abrazo
Para sacar tu mayor potencial y desarrollar un talento, tienes que tener tu propio empuje, sigue así Mauricio, éxitos.
bien hay brother sigue marcando la diferencia ... eres un referente para la juventud trujillana saludos..
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